Segundo año de la feria y segunda estafa a la credibilidad que los turistas y vecinos le confieren a un acto organizado por el Ayuntamiento de Navaluenga; tampoco me quiero olvidar de los comerciantes del pueblo, porque supongo que en pos de promocionar los frutos de nuestra tierra, no tienen problema en perder un buen día para la venta de determinadas mercancías, pero otra cosa es resignarse ante esta feria de la picaresca vil y la estafa a la buena fe de los asistentes.
Supongo que en la mediocre mentalidad de algún político local, cabrá un pensamieto de este tipo:
" Montamos un espectáculo fácil, total a los turistas ya los tenemos y se meten en cualquier "sarao" que les montemos; de paso quedamos bien con algunos "bolsillos agradecidos" y futuros votantes, y los turistas no se enteran de nada...," y podría continuar su torpe pensamiento con el eslogan de un conocido anuncio : " Yo no soy tonto".
Pues sí, eres tonto porque así no generas un feria de prestigio, una feria que "haga pueblo", sea reconocida en la región, y atraiga nuevos visitantes; tambien eres tonto, porque algunos turistas se cansan de algunas cuestiones de nuestra "ciudad sin ley", y sucede lo que sucede: Como relato en el artículo de abajo hemos retrocedido en el porcentaje de ocupación de nuestras casas rurales y hasta Burgohondo nos ha superado.
No eres tonto, sólo un pícaro algo miserable, si piensas que da igual, que de todas maneras ganarás la próxmas elecciones, y que hay que obedecer al titiritero que dirige el chiringuito desde la sombra.
Lo de los melocotones era un comentario generalizado entre los vecinos de la plaza, porque los nuestros todavía no han madurdo lo suficiente para la venta y tienen otro tamaño; solo tienes que pasearte por las huertas o preguntar a los vecinos; los espárragos chinos y los pimientos peruanos se identifican en las etiquetas; pareciera que ni siquiera los envasan, simplemente los compran y revenden, aunque no se olvidan de ponerle una etiqueta que les identifica con un pueblo vecino.
El año pasado le comenté al concejal Sergio Risco estas circunstacias durante el transcuro de la feria, y el me contestó esto:
" Se nos han colado entre tantos puestos,ya no volverá a pasar".
Tantos puestos, parecía que me hablaba de Mercamadrid y no de una feria con no más de diez puestos; yo quiero pensar que no me mintió deliberadamente, y que la organización no depende de él, si no del titiritero que repartió las cajas el año pasado, a la mañana temprano;
Pueden buscar esto último en el artículo del seis de setiembre del año pasado donde se repiten las mismas circunstancias, y figura lo expresado por Segio Risco- ver: " Primera feria del melocotón y productos de la tierra: Un cuento chino"-.
De todas maneras, les digo lo de siempre: No me crean, pregúntenle a alguien ecuánime y de su confianza.
Pensaba descansar unos días de la turbia política de nuestro pueblo, pero estos "muchachos" no me dejan descansar; en fin, es lo que pasa cuando se transforma una actividad tan noble como la política, en un espectáculo cutre, sectario, y falaz.
Continuación, con nuevos datos:
Antes de comenzar el mercado, se generó una discusión entre estos " trileros" profesionales:
El padre de un concejal, todo un valiente caballero, le quitó el puesto que tenía colocado la mujer de "El Ciruja", y se generó un clima de discusiones y disputas; alguien diría que nos movemos ante un clan con modales cuasi-mafiosos, donde algunos tienen más mando que otros; también diría que alguno de estos señores- no los coloquemos a todos en la misma actitud-, con modales de"scassapagliara"- término despectivo con que la mafia denomina a los que ni siquiera cumplen con sus mínimos códigos de conducta, de ciertos "modales" o decoro, y su organización (como el triste espectáculo con esta señora mayor e indefensa), y les dan vergüenza ajena-, se muestran muy tranquilos luego de haber tenido que pasar revista, hace quince días, ante una inspección de trabajo; parece que cuentan con la protección del titiritero*.
Estamos esperando un comunicado del ayuntamiento aclarando esta situación.
Más abajo les dejo la versión de unos comentaristas, que de ser confirmada, nos sitúa ante unos hechos cuasi-delictivos, y por supuesto, vergonzosos; me dicen que los melocotones se vendían en la feria a 2,50 euros, cuando en el mercado se venden a aprox. 1, 90euros, y les agregaron una pegatina con el escudo de ayuntamiento de navaluenga; pingüe negocio para los "amiguetes" y votantes cautivos.
Por favor, si tienen más información no dejen de aportarla, porque lo pueden hacer de forma anónima.
[Un anónimo dice: Anónimo2 de septiembre de 2013 02:28
1000 kilos de melocotones a 1.50€ comprados en Barraco en Almacen de frutas Cristino por nuestro ¨señor¨ alcalde, y descargados en el polideportivo, para la feria del melocotón y productos de la tierra de Navaluenga. Esta es la manera de llenarles la andorga a tanto estomago agradecido, que tiene nuestro alcalde. Que pena no poder publicarlo en algún diario en que se pudiera enterar más gente.
Así se hacen las cosas en este nuestro pueblo, no el de unos pocos.
SINVERGÜENZAS.]
Así se hacen las cosas en este nuestro pueblo, no el de unos pocos.
SINVERGÜENZAS.]
Nuestro Ayuntamiento encarga un camión de melocotón Aragonés, ponen en las planchetas una pegatina con el nombre y el escudo de Navaluenga bien grande, lo reparten entre los que se prestan al fraude, que suelen ser quienes hacen una competencia directa a los empresarios sin estar dados de alta como tales, y el mismo producto que en cualquier tienda del pueblo puedes adquirir por 1,90€, lo venden sin rubor a 2,50€ haciéndolo pasar por un producto de la tierra.
Viva el fraude...sin complejos.
SINVERGÜENZAS
Viva el fraude...sin complejos.
SINVERGÜENZAS
El alcalde va en la dirección contraria a lo que declara en el periódico del poder en Ávila ( VER ENLACE):http://www.diariodeavila.es/noticia/Z51F1270C-CCDB-0E8C-CB1D510459B11852/20120903/melocoton/busca/ser/embajador/alberche/ferias/turisticas
* No estoy en contra de la venta, pero sí de los clanes y caciques que estropean cualquier iniciativa virtuosa, y que impiden cualquier organización y control medianamente razonable.
Gonzalo Quiroga.
Rectificar es de sabios Gonzalo, y esto sí me gusta. Esto no es ninguna feria del melocotón, ni de productos locales, ya lo comente en tu artículo del año pasado. Esto es un premio que nuestro señor Alcalde concedió en su día a todos estos vendedores ILEGALES, JUBILADOS, por no crearle problemas a la hora de intentar CONSOLAR, a los comerciantes LEGALES, mandándolos a seguir vendiendo ILEGALMENTE, en el río. Pobrecillos, que injusticia, que ansiosos esos comerciantes que pagando impuestos se quejan, era el comentario general. Pero enseguida les concedió la feria de productos de la tierra, aunque muchos de los productos que allí se venden vengan de donde sea. ¿ qué a pasado con las denuncias que en su día efectuó un inspector de trabajo ? ¿ se sabe algo?. Fue bochornoso ver el sábado por la mañana, como empleados del ayuntamiento, pagados por todos los que pagamos impuestos, montaban y ayudaban a todos estos JUBILADOS a montar los puestos ILEGALES. Discutían entre ellos por que todos querían el mejor sitio. Esto es vergonzoso. Quien controla la calidad de los alimentos que allí se venden? Quien sabe si esos productos que se venden por la calle, en el río, con las heces y orines de animales de 2 y 4 patas hay por todas partes, residuos de botellones nocturnos. Los curaron el día de antes?. Que vergüenza
ResponderEliminarEstoy a favor de que se vendan productos de nuestros huertos, pero los excedentes y no lo que montan algunos, como un pariente del ex-alcalde.
EliminarClaro que debería haber una organización y un control, y esa labor la debería ejercer el ayuntamiento; pero es lo de siempre, para favorecer a los amiguetes, se mira para otro lado.
Creo también, que si se trabajase con seriedad, los comerciantes podrían vender productos de nuestros huertos; esto no es novedoso, pasa en muchos lugares, y evita enfrentamientos como los que padecemos.
Nada, tienes razón en muchas cosas de las que dices, pero es porque tenemos un ayuntamiento sectario e ineficaz.
Saludos, y gracias por tu comentario.
Gonzalo.
Nuestro Ayuntamiento encarga un camión de melocotón Aragonés, ponen en las planchetas una pegatina con el nombre y el escudo de Navaluenga bien grande, lo reparten entre los que se prestan al fraude, que suelen ser quienes hacen una competencia directa a los empresarios sin estar dados de alta como tales, y el mismo producto que en cualquier tienda del pueblo puedes adquirir por 1,90€, lo venden sin rubor a 2,50€ haciéndolo pasar por un producto de la tierra.
ResponderEliminarViva el fraude...sin complejos.
SINVERGÜENZAS.
1000 kilos de melocotones a 1.50€ comprados en Barraco en Almacen de frutas Cristino por nuestro ¨señor¨ alcalde, y descargados en el polideportivo, para la feria del melocotón y productos de la tierra de Navaluenga. Esta es la manera de llenarles la andorga a tanto estomago agradecido, que tiene nuestro alcalde. Que pena no poder publicarlo en algún diario en que se pudiera enterar más gente.
ResponderEliminarAsí se hacen las cosas en este nuestro pueblo, no el de unos pocos.
SINVERGÜENZAS.
Pagarán en el Ayuntamiento el IVA?
ResponderEliminarEstos i-Responsables por no decir Presuntos-delincuentes destruyen la fama del melocotón Pernilero Amarillo de Navaluenga.
ResponderEliminar!Que pena!.Por no decir vergüenza o mas bien falta de esta última.
Y ¿quién ha sido el ideólogo? ¿Se le puede acusar de fraude alimentario? Con lo fácil que es ir con la verdad por delante. Y ahora los que pasarán la vergüenza son los vendedores. Que pena me dan. Navaluenga: “Paraíso del Alcornoque (el árbol no)”
ResponderEliminarSeria de sentido común, desplazar la celebración de la Feria hasta el momento oportuno (haciéndola coincidir con las fechas reales de la cosecha en Navaluenga), incentivando (sin trampas, ni fraudes) verdaderos productos de nuestro pueblo, generando un turismo que no se centre exclusivamente en el periodo estival.
ResponderEliminar¿Que necesidad tienen de de protagonizar estos fraudes?
Si piensa el Alcalde, que esta es la manera de hacer trascender un evento al que quieren darle continuidad, a perdido el juicio... o la vergüenza.
No pueden tratar a los turistas y veraneantes como a ganado, y timarles amparándose tras el escudo de Navaluenga y en nombre de su Ayuntamiento.
Y no que no pueden hacer de ninguna manera es implicar al resto de los vecinos en ese fraude, tenían que haber previsto que no todos estamos dispuestos a mentir para protegerles, y cuando nos preguntan de donde son los melocotones decimos la verdad.
Este timo que han propiciado y financiado con dinero publico, es una muestra de su forma de gobernar Navaluenga.
El alcalde es un fraude maño...como el melocotón de la feria.
El melocotón podría ser «el embajador» con el que los municipios de la zona del Alberche acudieran a partir de ahora a certámenes feriales «como Intur o Fitur». Ese es, como confirma el alcalde de Navaluenga, Armando García Cuenca, «el objetivo» de este Ayuntamiento que intentará llegar a un acuerdo con productores y, sobre todo, «con alcaldes de esta comarca para poner en valor este apreciado frutal fuera de nuestra provincia».
ResponderEliminarY es que todavía hoy muchos vecinos de Navaluenga recuerdan como entrado septiembre comenzaban a llegar a ésta y a otras localidades de la zona del Alberche decenas de camiones procedentes de Murcia que cargaban kilos y kilos de los exquisitos melocotones que se producían en esta zona de la provincia de Ávila.
Hace ya mucho tiempo que los camiones de la región murciana dejaron de hacer parada en Navaluenga y mucho también que los productores de melocotón de la zona decidieron ir abandonando progresivamente el cultivo de este frutal que en otra época se convirtió «en un importante sustento para las familias» del lugar pero que en los últimos tiempos malvendían «por cuatro perras» fuera de la provincia. Sin embargo, el melocotón de Navaluenga, y en general el que se produce en el resto de pueblos de la comarca, no ha perdido la fama que ganara hace ya varias décadas y aunque ya casi nadie vive de ello, muchas son las familias que siguen cuidando sus árboles para el consumo doméstico y, si se tercia, para vender a los forasteros que año tras año por estas fechas recalan en esta localidad y se llevan como recuerdo un melocotón «muy apreciado por su textura y sabor».
Poner en valor el melocotón de Navaluenga, y por extensión el del resto de municipios de la zona, a la vez que recuperar «una producción que llegó a alcanzar el millón de kilos anuales» es uno de los objetivos con los que el Ayuntamiento de Navaluenga organizaba la Feria del Melocotón del Alberche, un evento ferial que tuvo lugar durante la mañana del domingo y que congregó en la Plaza del Ayuntamientos a una docena de productores de este frutal, así como a numerosísimo público.
Pero la feria, que, aseguró Armando Cuenca, alcalde de Navaluenga, «nace con idea de continuidad»
Y YO ME PREGUNTO: PUESTOS A...
ResponderEliminar¿Por qué no permitir que los que pertenecemos al sector de la hostelería en Navaluenga podamos vender todo el año en la calle, con aperitivos y raciones elaboradas con PRODUCTOS DE LA TIERRA y VINOS DE LA COMARCA, al igual que lo hacen los JUBILADOS de este pueblo casi todo el año: productos de la tierra y de donde sean, sobrante y no sobrante? (porque si no sobra, se compra y arreglado)
Tampoco merecemos los hosteleros, que damos servicio durante todo el año al turismo que visita nuestro pueblo, una FERIA DE HOSTELERÍA; porque para tradición tanto o más que la del melocotón, la de los bares de Navaluenga, que con una población de alrededor de dos mil habitantes ha llegado a tener entre cincuenta y sesenta – o más- bares.
Yo creo que es uno de los negocios que, después de la construcción, más trabajo ha generado en nuestro pueblo en los últimos cuarenta años. Por supuesto, se celebraría también LA FERIA DEL CORTO CON APERITIVO, el segundo o tercer sábado del mes de AGOSTO, en la PLAZA DEL ALCALDE (por sugerir un sitio apropiado). Esto más que nada sería por no quedar sin feria un gremio tan grande como el de la hostelería, pues tenemos feria del melocotón (con melocotones comprados fuera del pueblo), mercado medieval (que de medieval no tiene nada), feria de ganado (ahora que no hay casi ganado en el pueblo), feria del vino y de la carne – que, al parecer, se la han cargado este año- (se celebró en San Juan de la Nava), feria de artesanía (no sé de qué tipo de artesanos hablamos), feria del trueque (como el mercadillo de los miércoles, pero en menor escala), feria de micro-emprendimientos artesanales (¿esto qué es lo que es?), feria de los romanceros (degustación de “bollitos de los que manchan el bolsillo” y sangría incluidos); y no sé si me olvido de alguna fiesta más, si es así pido disculpas.
El caso es que los hosteleros, esclavos de su negocio y fieles pagadores a la hacienda, fieles pagadores de todos los tributos municipales, con subidas de impuestos y cada vez más prohibiciones e imposiciones por todas partes; NO DISPONEMOS DE UNA FERIA DE HOSTELERÍA.
Por favor, recapaciten. No más injusticias ni discriminaciones.